martes, 8 de enero de 2013

DIEZ planes interesantes para hacer GRATIS en BARCELONA (II)


Iglesia del Sagrado Corazón, de estilo neogótico, en el Tibidabo

6.- CATEDRAL


En una época en la que casi todas las catedrales españolas (incluidas muchas de las más discretas a nivel artístico) piden un dinero para ser visitadas, Barcelona, curiosamente, sigue permitiendo disfrutar de su catedral "por la cara". Es más, puede incluso presumir de permitir visitar su claustro de forma también gratuita, lo cual es aún más extraordinario si cabe. Al menos así ha sido en 2012, que viendo la trayectoria de otros templos por el estilo, quizá en el futuro esto deje de ser así.

La catedral de Barcelona, de estilo gótico en su mayor parte, cuenta también con la fachada principal de estilo neogótico (acabada a finales del s. XIX, cuando el resto de la catedral es de los s. XIII-XV). En su claustro viven trece ocas en honor a Santa Eulalia, patrona de la catedral. El motivo es porque fue martirizada cuando contaba solo con trece años y porque ella y su familia se ganaban la vida con el pastoreo de ocas.

Catedral de Barcelona, su neogótica fachada principal
Cuenta con tres naves de la misma altura, algo típico en el gótico catalán, siendo la central el doble de anchas que las dos laterales.

Para entrar el código de vestimenta es especialmente estricto, al menos para lo que he visto en otros sitios de España. En la entrada principal, al menos, suele haber colocado un hombre que niega la entrada a las personas que no vistan de acuerdo con sus normas. Hay que tapar las piernas al menos hasta las rodillas y no enseñar los hombros ni el pecho en absoluto, y esto aplica igualmente a hombres y a mujeres.

ACTUALIZACIÓN EN NOVIEMBRE DE 2014: alguno de los amigos que ha visitado en los últimos meses Barcelona nos ha comentado que han empezado a cobrar por ver la catedral :(

7.- BASÍLICA DE SANTA MARÍA DEL MAR


La que seguramente sea la iglesia más querida de los barceloneses también es gratuita. El motivo es porque, frente a la catedral, sufragada por el alto clero y la monarquía, esta iglesia fue pagada y construida por iniciativa popular de los habitantes del barrio de la Ribera, en el que se ubica. Realizada por completo en un tiempo excepcionalmente corto para la época (1329-1383, poco menos de 55 años) y para la envergadura del templo, es también de estilo gótico catalán. Se manifiesta esto en la anchura de las naves y la austeridad de su interior, donde se ha deseado que la principal "decoración" del templo sea la luz que entra a través de sus vidrieras. Y desde luego que sus creadores hoy estarían orgullosos del resultado obtenido.

ACTUALIZACIÓN EN NOVIEMBRE DE 2014: hemos visto un letrero en la puerta de la basílica por el cual parece que han empezado a cobrar en los últimos meses :( No obstante, yo he vuelto a entrar gratis de nuevo un sábado por la tarde, por lo que no acabo de entender cuándo las visitas son gratuitas y cuándo no. El sábado por la tarde, por haber habido misa poco antes quizá las visitas eran libres y gratuitas...

Fachada de Santa María del Mar

8.- FUENTES MÁGICAS DE MONTJUIC


Estas fuentes, herencia de la exposición universal de 1929 y de los juegos olímpicos de 1992, dan un espectáculo de luz y sonido que hace las delicias de los turistas. La música utilizada suele ser variada, de diversos géneros y épocas. Se encuentran en la colina de Montjuïc, a medio camino entre la Plaza de España y el palau de Montjuïc.

Se ofrecen espectáculos de jueves a domingo los meses de mayo a septiembre (21-23:30 horas, habiendo un espectáculo cada media hora, el último empieza a las 23), navidad y semana santa (19-21 horas, cada media hora, el último empieza a las 20:30). El resto del año (octubre-abril, excepto navidad y semana santa) solamente viernes y sábados, con idénticos horarios a los de navidad y semana santa.

Fuentes mágicas de Montjuic, en pleno espectáculo
La música, los efectos de agua y el color que toma la fuente principal no decepcionan. En fechas señaladas o en cualquier día veraniego la cantidad de gente reunida alrededor de ellas puede ser más que considerable.

9.- SUBIDA AL TIBIDABO


Existen dos formas distintas de subir al Tibidabo en transporte público: una para "turistas" y otra para "residentes". La primera tiene un precio aproximado de 7€ y la segunda depende del tipo de billete, pero sería de solo 1€ con el billete "T-10", el más extendido, como cualquier otro viaje en metro o bus por la ciudad.

Vistas desde el Tibidabo
La forma de subir para turistas, conlleva llegar hasta la parada "Avenida Tibidabo", la última de la línea 7 de metro; desde ahí, subirse en el encantador "tramvia blau" ("tranvía azul"), y luego coger el funicular que sube hasta el Tibidabo, que nos deja junto al parque de atracciones. Y la llamo de turistas, porque aparte de ser la más evidente y romántica, es con diferencia la más cara. Ni el tranvía azul ni ese funicular están incluidos en la red integrada de la TMB, la empresa encargada del transporte metropolitano de Barcelona, y se pagan aparte. Si se desea disfrutar del parque de atracciones, se puede conseguir un descuento de hasta el 100% en el funicular, pero no es el objetivo de muchos de los que subimos hasta allí.

Como alternativa, menos evidente pero casi igual de rápida y totalmente integrada en la red de la TMB (lo que significa que no es estrictamente gratis, pero que el subir cuesta solo un billete de metro de la zona 1), se puede subir con el siguiente recorrido: llegamos hasta la parada "Feu del Funicular", en la línea de la FGC que va de la plaza de Cataluña a Sant Cugat; desde ahí, cogemos el funicular de Vallvidrera, que nos dejará en el barrio del mismo nombre (hemos de bajarnos en la segunda y última parada del mismo), y junto a la salida del funicular encontraremos una parada del bus de barrio que atiende esa zona. Subiéndonos en él, llegaremos al Tibidabo, donde el minibus nos dejará junto a la iglesia del Sagrado Corazón y al parque de atracciones. Como hecho anecdótico, decir que el concepto de "bus del barrio", tan extendido en Barcelona a día de hoy, nació en Vallvidrera siendo esa línea (que hoy es la "111") la primera que existió en la ciudad.

Interior de la iglesia del Sagrado Corazón, en el Tibidabo
Posteriormente, disfrutar de las vistas es gratuito, se puede acceder al recinto del parque de atracciones aunque no se desee montar en nada. También es gratuito acceder a pie al interior de la neogótica iglesia del Sagrado Corazón, tanto a la cripta (la planta más bonita a mi gusto) como a la iglesia en sí. Desde la explanada de la iglesia, las vistas son muy buenas también. Es posible subir más arriba aún, a través de un ascensor que hay en el interior de la iglesia y que nos deja cerca de la parte más alta de la misma, donde podemos pasear junto a las esculturas que la presiden, aunque para ello tendremos que abonar 2€.

Las vistas de Barcelona son soberbias, algo a lo que ayuda la altura de 512 metros que tiene el monte. La vista abarca todo el "Barcelonès", la comarca del área metropolitana más próxima a la ciudad, que incluye Hospitalet, Santa Coloma, Sant Adrià, Badalona y la propia Barcelona, más otros municipios próximos como Cornellà o incluso del Maresme. Mirando hacia el otro lado no es difícil ver zonas del Vallès Occidental. El trazado rectilíneo del ensanche de Barcelona también es fácilmente identificable, así como buena parte de la sierra de la Collserola, a la que pertenece el Tibidabo.

10.- COLINA DE LA ROVIRA (TURÓ DE LA ROVIRA)


Un mirador alternativo al del Tibidabo, así como a otros que tiene la ciudad como Montjuïc o el parque Güell, es esta colina, protagonista del parque del Guinardó, ubicado en el distrito Horta-Guinardó. Se trata de un pequeño secreto, poco conocido entre turistas e incluso relativamente desconocido para algunos barceloneses. La colina de la Rovira forma parte del pequeño conjunto de colinas que existen en el centro-oeste de Barcelona, que son sendos parques como el del Carmel o el famosísimo parque Güell. Sin embargo, probablemente las mejores vistas las ofrece la Rovira, por la pendiente que tiene, por no tener árboles en su cumbre y porque al no ser apenas conocida por el turismo, se puede disfrutar bien, solo acompañados por jóvenes tomando algo, tocando música o simplemente charlando.

Vistas subiendo a la colina o "turó" de la Rovira, al atardecer
Se puede subir a la Rovira a pie desde varios rincones, o bien siguiendo senderos o bien por calles urbanizadas que nos pueden llevar hasta casi la misma cumbre, porque las viviendas rodean la colina y llegan a casi tocar la cima de la misma. La forma más directa que conozco para subir desde zona turística (alrededores del hospital de Sant Pau y la Sagrada Familia) es a través de unas escaleras que suben junto a la calle Tenerife, que se convierten en sendero más tarde. Otra buena manera es a través de la carretera del Carmel, que pasa por una especie de puerto entre las colinas del Carmel y la Rovira. Para los más perezosos, el hecho de que la colina esté urbanizada tiene como ventaja que otro bus de barrio llega hasta allí, el 119, que no he usado nunca pero que encima debe enlazar con las paradas de metro del Carmel y del Coll | Teixonera, ambas en la línea 5.

Este mirador ofrece una mirada con menos altura de la ciudad que el Tibidabo o Montjuic (pero más que el parque Güell, o esa sensación da), pero a cambio nos encontramos geográficamente mucho más metidos en Barcelona, con lo que los edificios destacables y los más corrientes se ven mucho más cerca. A un lado tenemos la Barcelona monumental, con la Sagrada Familia como protagonista y el mar de fondo, y al otro lado la Barcelona más popular, con barrios como el Carmel y la vista de la Collserola. Recomiendo subir a allí durante un atardecer despejado porque son mágicos, viendo como el sol se esconde por el Tibidabo y tiñe de naranja los barrios barceloneses.

El inconfundible perfil del Tibidabo y la torre de la Collserola, vistos al atardecer desde la colina o "turó" de la Rovira
El valor de la Rovira no acaba aquí, ya que tiene cierta importancia histórica y etnográfica. En ella se ubicó una batería antiaérea que durante la guerra civil luchó contra la aviación fascista. Más tarde, en la misma cima se ubicó un barrio de barracas que sobrevivió hasta principio de los 90, poblado por inmigrantes de otros puntos de España, principalmente andaluces. Ambas cosas son aún visibles (se pueden ver hasta los azulejos de la cocina de una de esas barracas) en el lugar, donde también hay sitio para un depósito de aguas. Varios paneles del MUHBA (museo de historia de Barcelona) nos cuentan estos y otros detalles de esta colina de 261 metros de altura.

2 comentarios:

Capitán trueno dijo...

Muchas gracias por ofrecernos estas 10 visitas maravillosas. He estado en Barcelona varias veces y tengo que darte la razón. Me parece muy interesante informar sobre visitas que se pueden hacer en esta ciudad y que, además, no cuestan un euro. Siempre se dice que Barcelona es cara, pero queda demostrado que se pueden hacer infinidad de cosas sin gastar dinero.

saetismo dijo...

De nada, es un placer. Viviendo aquí es más fácil saber qué cosas se pueden ver gratuitamente, y tras comprobarlo por mí mismo he decidido compartirlo porque creo que puede ayudar a otras personas, y más en los tiempos que corren :)